Las visitas domiciliarias nos permiten ofrecer nuestros servicios con la misma filosofía que lo hacemos en la consulta pero con mayor comodidad para la familia.
Para una madre que acaba de dar a luz y para su recién nacido (consulta de lactancia, revisiones pediátricas), la posibilidad de recibir la atención necesaria en su propio entorno y sin desplazamientos suele ser de gran importancia en momentos de tantos cambios. Además, nos permite a los profesionales valorar y aconsejar sobre los cuidados necesarios tanto para el bebé como para la mamá, observando su ambiente habitual y adaptando las recomendaciones al mismo.
En el caso del niño enfermo (urgencias pediátricas), la visita a domicilio nos evita las largas esperas habituales en las urgencias hospitalarias (con el riesgo que esa espera en una sala de espera con otros enfermos conlleva) y nos da la comodidad de atender al pequeño en el espacio donde se siente mas seguro y tranquilo, lo cual es aún mas importante en caso de enfermedad.
También los talleres de masaje infantil y de preparación a la lactancia, tanto individuales como grupales, pueden ser realizados en el domicilio.